Estoy agobiada, tensa... Mi nivel de nerviosismo aumenta por momentos; ¡y con esa voz de fondo que no para! ¿Quién me mandó a meterme en esto? ¿Quién? No me hacen caso. No sé cuántas vueltas he dado ya.
¿Por qué me metí en el carril central de esta rotonda?
Visita mi blog: bajolaluzdemiquinque.blogspot.com
3 Comments to "Agobio, ergo sum"